“Al principio con Spot no fue nada fácil. Era muy intenso, se le tiraba a los perros a ladrar, se le tiraba a las personas que venían a la casa, ladraba cuando salíamos a caminar y jalaba demasiado, lloraba antes de salir y los paseos eran difíciles pues yo soy una persona que no tiene mucha paciencia.
Entonces llegó Laura a ayudarnos y a guiarnos. Nos enseñó que con amor y paciencia todo se puede lograr, yo pensaba que era un entrenamiento para Spot, pero me di cuenta que el entrenamiento era más para mí que para él.
Laura me dio la confianza y la seguridad que necesitaba para salir con Spot, al principio fue muy difícil pues con cualquier cosa que yo hiciera mal me estresa muy fácil y eso se lo transmitía a él, pero con paciencia y con entrenamiento constante los resultados esperados se hicieron notar cada vez de una mejor manera.
Ahora salir a caminar con Spot es otra cosa, el va feliz y yo voy segura y con la confianza de que si podemos lograrlo, y en la casa es otra cosa, aunque sigue siendo enérgico ahora se logra tranquilizar más fácil.”